Pulverizar el adhesivo reposicionable en el revés  de la plantilla, apoyar la cara  que tiene el adhesivo sobre la hoja de papel con motivo en escocés, (siempre en el revés de la hoja). De este modo nos aseguramos que la plantilla no se desplace en el momento de marcado y los pliegues de la caja coincidan perfectamente. Repasar  todo el contorno con lápiz incluyendo las guías de la plantilla que indica el pliegue del papel. Proceder de igual modo con la otra plantilla (la base de la caja) en el otro color de papel. Recortar por el contorno.
Con birome sin tinta o bolillo y regla marcar por las líneas de doblez, para facilitar el mismo. Terminar de hacer todos los pliegues.
En un papel plastificado pulverizar el adhesivo permanente y levantar el mismo apoyando sólo la parte del papel que va pegado hacia el interior de la caja, realizar el contacto  y cerrar el lateral de la caja, el secado del adhesivo es instantáneo, ya que con esta técnica transformamos el papel en autoadhesivo. De igual modo, levantar adhesivo con la base de la caja y adherir.
Perforar cada punta de la parte superior de la caja para pasar la cinta de gasa
Decorar  uno de los frentes con pequeños cortes de papel, una muñequita cookie y cintas al tono. Proteger todo el trabajo con barniz brillante, el cual realzará más los motivos del papel.